Bendiciones

fecha de publicación: 26/10/2010

ilustrador/es

• Sendak, Maurice

Dichosos los niños criados en el amor a una isla. Aprenden lo antes posible ciertas prácticas útiles para el futuro de la existecia: la imaginación, la soledad, la libertad, hasta cierta insolencia respecto de la tierra firme; y a escrutar el horizonte, navegar a vela, aprender a partir…
Nuestra isla.
Desde septiembre hasta finales de junio, en la grisura escolar de París, sólo soñábamos con ella. La llevábamos adherida por doquier, en nuestras habitaciones, debajo de la tapa de nuestros pupitres, sin duda asimismo en el reverso de los párpados. Hacia ella convergían nuestros proyecto de amor o de aventura. La isla nos consolaba de todo a la vez que nos avergonzaba de nuestras debilidades. ¿Quién hubiera podido educarnos mejor?
Habremos saltado de verano en verano como de piedra en piedra al cruzar un vado. El resto de nuestras vidas puede olvidarse sin pesar.

Erik Orsenna , "Dos veranos"